Con la iglesia hemos topado.
Este problema nos lo vamos a encontrar todos los que tengamos tiendas en el sector del retail.
El problema viene a que por ley, los precios de dichos establecimientos tienen que estar etiquetados con el PVP, es decir, con el IVA incluido. Es decir, si un usuario coge un producto cuya etiqueta pone 2,80 P cuando llega la caja ese el precio que espera pagar. Para que no hubiese problema, nuestros programas calculan tanto la Base como el IVA a partir del total hacia atrás.
Sin embargo, por ley, una factura se debe calcular de la siguiente forma -> Base Imponible (redondeada a 2 decimales) + importe IVA (redondeado a 2 decimales) = Total Factura.
En nuestro caso sería : 2,55 + 0,26 = 2,81. El importe de IVA de 2,55 redondeado a 2 decimales es 0,26, si o si. Lo demás es hacer trampas al solitario.
Si cogiéramos como Base Imponible 2,54 el calculo sería: 2,54 + 0,25 = 2,79.
Esto es la cuadratura del circulo, matemáticamente no hay ninguna Base Imponible redondeada a 2 decimales a la que sumándole el IVA redondeado igualmente nos de un valor de 2,80.
El problema es que en la administración de matemáticas no van muy sobrados y por un lado obligan a que los establecimientos etiqueten los precios con IVA, pero por otro lado cuando envías una factura electrónica (de momento ya es obligado en los organismos oficiales) tiene que estar valorada correctamente conforme a las reglas que ellos establecen, no vale calcular el IVA o la Base por sustracción porque en ese caso te la rechazan porque no está bien valorada. Yo lo estoy sufriendo cada vez que un cliente intenta enviar una factura a un ayuntamiento a través de FACE.
Si alguien tiene una varita mágica que resuelva este problema, haría bien en difundirlo, pero creo que nos vamos a divertir en cuanto el Verifactu y la Factura electrónica entren a pleno funcionamiento.
|