Bueno, finalmente y después de pelearme bastante rato con el tema lo he conseguido.
Gracias a todos.
La solución (la explico por encima, aunque espero si tengo un hueco exponerla completa en mi blog, por si le sirve a alguien más) ha sido:
(1) Puesto que Windows a través de los programas
Ext2Fsd,
Parangon ExtBrowser o
Ext2Explorer entre otros no permite acceder a particiones ext4, que son las que crea Ubuntu 10, la solución pasaba por crear una partición nueva de tipo ext2 (y a ella mover GRUB).
(2) He creado una partición nueva (utilizando una herramienta externa -Hiren's BootCD indispensable como siempre
-) y desde el propio ubuntu, utilizando la herramienta
GParted la he formateado como ext2 y la he marcado como boot.
(3) Después siguiendo vuestras indicaciones, la opción es pasar GRUB desde la partición donde se encuentra (y a la que no podemos acceder porque es
ext4) a la nueva formateada como
ext2. Esto aunque se dice pronto me ha costado
sudor, lágrimas y unos cuantos aranques con
Super Grub2 (
NOTA).
(4) Una vez conseguido, ahora sí puedo acceder desde windows utilizando las herramientas comentadas antes, al fichero de configuración de Grub2 (
grub.cfg) y cambiar (tal y como ha dicho Julián) el arranque por defecto en el fichero, para conseguir que al siguiente reinicio Grub2 tenga otro S.O. como opción por defecto para el arranque.
(NOTA):
Super Grub2 es una pequeña ISO que permite recuperar el arranque (GRUB2) en caso de que este esté dañado o se haya perdido. Esta ISO, junto con el LiveCD de Ubuntu me han permitido arrancar y recuperar (bastantes veces) el sistema, después de las pruebas que he ido realizando.
Un saludo.