¡Hola a todos!
Y que decir de una clienta neurótica que tuve hace tiempo. Me hizo la vida imposible. Hija del dueño de la compañía, hiriente, fría y calculadora con cada palabra que salía de su voca.
Hormonalmente desatendida, desahogaba su tensión insultando con palabras incisivas de desaliento a todos sus empleados, los cuales ya ni suspiraban ante tal desesperanza. Y a los proveedores nos hacía esperar horas en el pasillo del horror, para luego salir muy campante de su oficina y decirnos: "
¡Ay! ¿que no te llamó mi secretaría?, le dije que cambiara la cita para mañana?".
Había escrito dos párrafos más, pero los quité porque eran casi puras palabrotas.
En mi profesión, esa relación laboral fue lo peor que me ha sucedido. Ni siquiera los mil seicientos euros que perdí en otro negocio se comparan con el caso de la Gerente Fatal.
Por ello les recomiendo que antes de cerrar un trato, analicen la sicología del cliente. Porque hay unos que verdaderamente parecen creaciones de Stephen King.
Un abrazo.
Al González
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P.D. Voté por la opción del dolor de muela.