Mastreo Al, si empezamos a discutir la invención de palabras y de significados, los periodistas españoles se llevan la palma. Gracias a ellos ya no hay ideosincracias, problemas o impedimentos sino
problemáticas (la problemática de la industria de la construcción, la problemática del calentamiento global, la problemática de las intervenciones quirúrgicas...). Y es que, la parecer, en todas partes hay una señora que no hace más que molestar y poner la zancadilla.
Y no digo más porque se me caerá la cara de vergüenza.