[Gunman]
04-02-2006, 20:34:12
Este es un hilo-psiquiátrico, pues me apetecia contar mi suceso a alguien, lo necesito. Tal vez, hubiese que haber ido a un psiquiátra o psicólogo, pero como no tengo dinero pues lo cuento aquí para desaogarme, luego los administradores, si quieren que cierren el hilo. Dicho esto:
"Había una vez, un chaval que por las tardes, en vez de estudiar se dedicaba a 'perder el tiempo' jugando a programar. Al chaval le gustaba resolver problemas, desde los mas simples a los más complejos. (Bueno, quizás con los mas complejos no podía resistir la tentación de sentarse en el sofa y leer).
El chaval, estaba llevando entre manos un pequeño proyecto, que hacia tiempo que estaba desarrollando y ya lo había tenido que volver a empezar un par de veces por no poner comentarios (otro, mandamiento del buen programador). Esta vez, el chico se lo estaba currando con los comentarios, cada conjunto de instrucciones que realizaba una tarea específica (función) estaba perfectamente explicada con detalle y si había alguna línia de código que cabía la posibilidad de que se olvidase estaba explicada hasta el más mínimo detalle. Quizás, los comentarios eran excesivos.
El chaval, también participaba en un foro de internet de programadores de su mismo lenguaje, el Delphi. Él, se fijaba que había muchas preguntas que se repetían, que él, en algún momento también las había hecho y dijo: '¡¿Coño, porque no escribo las soluciones en un PDF y que rule?!' Y así lo hizo, empezó a buscar información sobre la WinAPI y las funciones para manejar archivos (copiar, mover, abrir, cambiar nombre, eliminar, etc.) y empezó a escribir un pequeño explorador de Windows para aplicar todas las preguntas que había recogido y así, que quedasen mejor explicadas en el artículo que estaba preparando.
Al cabo de una semana tenía el explorador terminado y empezaba a escribir el artículo. No había anandonado del todo su cliente FTP, pues cuando se artaba de escribir se ponia a programar el cliente.
Un día, vuelve a casa y enciende el ordenador para seguir escribiendo el artículo.
Aparece la información de la BIOS, aparece el gestor de arranque GRUB, abré el Windows XP Professional con el SP2 y le sale un bonit aviso de que ha habido un error en un disco duro. El S.O. le pide que analize el disco duro para buscar daños y el chaval, como no, acepta el trato. El disco duro era de 200GB, está unas 2 horas con el scandisk, reparando (almenos eso creía él) archivos. Termina de leer 'Rebelión en la Granja' y empieza a leer '1984', ambos del conocido autor inglés G. Orwell. Mira la pantalla, el scandisk ha terminado, le pide que reinicie el ordenador y así lo hace el chaval.
Reinicia y al ir a abrir su pequeño artículo sobre WinAPI, que estaba a punto de terminarlo se queda helado cuando vee que la carpeta donde tenía el documento no está! Busca el cliente FTP, tampoco! HA DESAPARECIDO sin dejar rastro!
Mira el Disco Duro y... ¡está vacio! Sólo queda un archivo extrañísimo que no se puede abrir de ninguna forma.
Todo a la mierda, todo el trabajo de tropocientos meses al carajo, no queda nada... Un momento! Un halo de luz brilla en los ojos de muchacho: las copias de seguridad en su CD-RW! Corre a buscarlo, lo coge, intenta abrir la tapa, está tan contento que le cae el CD, no pasa nada, lo limpia y lo mete en el lector. Mi PC... Backups CD1... ¡¿¡Fotos de cumpleaños!?!
En ese momento un jarro de agua fría, o mejor dicho, un yunque como el que el que le cae al Coyote, le cae en la cabeza. Definitivamente: todo a la mierda.
El chaval no sabe como sentirse, así que abre el Firefox y lo escribe el foro de programadores, esta a punto de tirarse por la ventana, pero no lo va a hacer, esto le habrá servido para algo, no? Mejor ahora, que en un trabajo. Ya puede añadir un nuevo mandamiento:
- Haré backups y no los borraré."
Gracias...
"Había una vez, un chaval que por las tardes, en vez de estudiar se dedicaba a 'perder el tiempo' jugando a programar. Al chaval le gustaba resolver problemas, desde los mas simples a los más complejos. (Bueno, quizás con los mas complejos no podía resistir la tentación de sentarse en el sofa y leer).
El chaval, estaba llevando entre manos un pequeño proyecto, que hacia tiempo que estaba desarrollando y ya lo había tenido que volver a empezar un par de veces por no poner comentarios (otro, mandamiento del buen programador). Esta vez, el chico se lo estaba currando con los comentarios, cada conjunto de instrucciones que realizaba una tarea específica (función) estaba perfectamente explicada con detalle y si había alguna línia de código que cabía la posibilidad de que se olvidase estaba explicada hasta el más mínimo detalle. Quizás, los comentarios eran excesivos.
El chaval, también participaba en un foro de internet de programadores de su mismo lenguaje, el Delphi. Él, se fijaba que había muchas preguntas que se repetían, que él, en algún momento también las había hecho y dijo: '¡¿Coño, porque no escribo las soluciones en un PDF y que rule?!' Y así lo hizo, empezó a buscar información sobre la WinAPI y las funciones para manejar archivos (copiar, mover, abrir, cambiar nombre, eliminar, etc.) y empezó a escribir un pequeño explorador de Windows para aplicar todas las preguntas que había recogido y así, que quedasen mejor explicadas en el artículo que estaba preparando.
Al cabo de una semana tenía el explorador terminado y empezaba a escribir el artículo. No había anandonado del todo su cliente FTP, pues cuando se artaba de escribir se ponia a programar el cliente.
Un día, vuelve a casa y enciende el ordenador para seguir escribiendo el artículo.
Aparece la información de la BIOS, aparece el gestor de arranque GRUB, abré el Windows XP Professional con el SP2 y le sale un bonit aviso de que ha habido un error en un disco duro. El S.O. le pide que analize el disco duro para buscar daños y el chaval, como no, acepta el trato. El disco duro era de 200GB, está unas 2 horas con el scandisk, reparando (almenos eso creía él) archivos. Termina de leer 'Rebelión en la Granja' y empieza a leer '1984', ambos del conocido autor inglés G. Orwell. Mira la pantalla, el scandisk ha terminado, le pide que reinicie el ordenador y así lo hace el chaval.
Reinicia y al ir a abrir su pequeño artículo sobre WinAPI, que estaba a punto de terminarlo se queda helado cuando vee que la carpeta donde tenía el documento no está! Busca el cliente FTP, tampoco! HA DESAPARECIDO sin dejar rastro!
Mira el Disco Duro y... ¡está vacio! Sólo queda un archivo extrañísimo que no se puede abrir de ninguna forma.
Todo a la mierda, todo el trabajo de tropocientos meses al carajo, no queda nada... Un momento! Un halo de luz brilla en los ojos de muchacho: las copias de seguridad en su CD-RW! Corre a buscarlo, lo coge, intenta abrir la tapa, está tan contento que le cae el CD, no pasa nada, lo limpia y lo mete en el lector. Mi PC... Backups CD1... ¡¿¡Fotos de cumpleaños!?!
En ese momento un jarro de agua fría, o mejor dicho, un yunque como el que el que le cae al Coyote, le cae en la cabeza. Definitivamente: todo a la mierda.
El chaval no sabe como sentirse, así que abre el Firefox y lo escribe el foro de programadores, esta a punto de tirarse por la ventana, pero no lo va a hacer, esto le habrá servido para algo, no? Mejor ahora, que en un trabajo. Ya puede añadir un nuevo mandamiento:
- Haré backups y no los borraré."
Gracias...